Suelen decir que no hay mejor desprecio que no hacer aprecio. Pues Mourinho no se rige por esas frases populares. Él sí hizo aprecio, el pasado jueves, en el partido de vuelta de Copa del Rey, a una afición que le dedicó, en cánticos, el peor de los deseos, el ya tristemente conocido y repetido en muchos estadios, por desgracia, ‘Mourinho muérete’.
Tras el partido, y después de esos cánticos malintencionados y que no deberían repetirse, el técnico madridista dijo: ‘La afición atlética es fantástica’. Aunque eso sí, cuando Cristiano Ronaldo hizo el gol, levantó el dedo y lo celebró a lo grande. Dándose un homenaje ante esa afición que no le deseaba nada bueno, calentándola aún más.
Aunque la afición rojiblanca ya iba un poco calentita. Sobre todo por la celebración del gol del 7 blanco, mandando callar a la grada con el dedo en la boca, al más puro estilo Raúl en el Camp Nou.
Pero lo que no sabemos es si lo hizo por los abucheos que recibía cada vez que pasaba un balón por sus pies o por el ‘Mourinho muérete’. Yo creo que más bien por esto último, porque el jugador luso ha demostrado que a él le importa bien poco lo que le abucheen en los estadios cuando toca un balón.
Otras curiosidades que nos ha dejado este derbi, al margen de los portugueses, es que ya van 20 derbis sin que el Atlético sea capaz de ganar al eterno rival. Y que el Madrid, después de cinco años, vuelve a estar en una semifinal de Copa del Rey, en esta ocasión ante el Sevilla, que parece que últimamente vuelve a ser ese gran Sevilla de antaño. Veamos qué cara es la que muestra el equipo de Manzano el miércoles, en la próxima ronda copera.
Ya veremos si para ese partido Benzemá estará en el banquillo, como ante el Atlético (aunque ni falta que hizo que saliera), o volverá a ser titular. Y si Mourinho pondrá de nuevo a Marcelo como lateral en el centro del campo, donde hizo un partidazo el jueves y hasta metió un gol, anulado por un fuera de juego que no fue. Y si Iker no vuelve a pecar de exceso de confianza ante Reyes, que pudo hacer un gol atlético, tonto y tempranero, que, tal vez, hubiera cambiado el rumbo de las cosas.
Pero, lo más importante es que, si el Madrid se impone en semifinales al Sevilla y el Barça al Almería, habrá una final “clásica” de Copa del Rey. La última fue en 1990, y ganaron los culés por dos goles a cero. Para ver qué pasa, habrá que esperar, pero sólo un par de semanas. Esperemos que la espera valga la pena.
No hay comentarios:
Publicar un comentario